La persona es nuestro centro

Confiar y acompañar

"Creo que en nuestra manera de trabajar destaca una mirada muy limpia hacia la persona, sin prejuicios y con mucha confianza en el otro y en sus posibilidades, que es lo que les hace más falta. Generalmente trabajamos con personas que vienen de situaciones muy complicadas, con multi problemáticas asociadas (adicciones, privación de libertad, violencia intrafamiliar, carencias afectivas, etc.), y han generado una desconfianza muy grande hacia el entorno y, sobre todo, hacia sí mismas. Entonces, nuestro trabajo como profesionales radica en ver a la persona como un igual y en confiar en que el cambio, la mejora personal es posible. No podemos cambiar su pasado, pero sí orientarlos para que construyan un presente y un futuro de oportunidades más alentador. Otro elemento clave de nuestro trabajo es el acompañamiento. No se trata de llegar donde la persona, aparentemente, no llega. Si no de acompañarla, de ir de la mano, para que vaya adquiriendo competencias, seguridad, autoestima hasta que al final la soltemos de la mano porque ya puede volar sola. Naturalmente no siempre todo es idílico, los procesos personales son complejos y en ocasiones duros, pero ese esfuerzo siempre vale la pena por casos como el de Desirée, entre otros muchos”.